- Edad recomendada: a partir del año y medio.
- Tiempo de preparación: 15 minutos
Es normal que los niños muestren interés por las actividades que realizan los adultos porque a través de la imitación van aprendiendo muchas de las cosas que les servirán en su día a día y que además les permitirán mejorar su motricidad y coordinación.
La cocina puede ser un espacio para realizar actividades sensoriales que ayudarán al niño a experimentar nuevas texturas y aromas, además de entregarle un sentido de participación respecto de las labores de la casa. A partir del año y medio los niños sienten la necesidad de explorar todo lo que los rodea, de ahí la importancia de este tipo de actividades
Materiales
- Huevos duros
- Agua
- Hielo
- Un bowl grande
- Toalla
Paso a paso
- Hervir los huevos como se hace normalmente para cocinar huevos duros (10 minutos en agua hirviendo).
- Ponerlos en un bowl con hielo para enfriarlos y explicarle al niño que los huevos están duros y se están enfriando para que él pueda experimentar.
- Invitar al niño a pelar un par de huevos duros. Experimentar quitar la cáscara y jugar con lo que hay en el interior.
Ojo: es fundamental tener cuidado con la temperatura de los huevos y con el lugar donde se realice la actividad. El niño debe estar siempre bajo la supervisión de un adulto para evitar accidentes. ¡A jugar!